Quién soy yo...

Me llamo Marcelo, he nacido en Buenos Aires, Argentina. He vivido con mis padres y mis dos hermanos hasta los 19 años cuando decido estudiar fotografía publicitaria y viajar a USA. Luego 20 años dedicado a la fotografía de moda y la publicidad, estas me habían agotado, vaciado y me preguntaba constantemente cual era mi aporte real, si es que había alguno, a este mundo a través de las imágenes. Decido mudarme a Barcelona. A partir de ahí comienzo un viaje interior de transformación personal, quería saber quién era, cuál era mi propósito y que era lo que la vida estaba esperando de mi. Fueron años difíciles de “no saber”. Gracias a las sincronías de la vida participo en una ceremonia de tradición originaria de los indios norteamericanos. Todo nuevo para mí. Al principio desconfié y cuestioné todo, tiempo después algo hizo “click” dentro mío y mi intuición me animaba a seguir caminando en esta dirección. Este camino me ha llevado de viaje hacia las profundidades de mi Ser. En este mismo camino, realicé lo que llaman la Búsqueda de Visión, ritual donde me he retirado a la montaña solo, ayunando, una vez al año durante 4 años, a rezar por mi vida y buscar mi visión/propósito. Finalmente encontré mi propósito, que es acompañar a personas en sus procesos personales. Así es como contacto con la terapia Gestalt. Me he formado en el Instituto Gestalt de Barcelona hace ya más de 10 años, ejerciendo en consulta privada, acompañando a personas en terapia individual, parejas, adolescentes. Ha sido una experiencia extraordinaria. También al mismo tiempo he colaborado, durante dos años, como terapeuta voluntario para una ONG. Mescladís, que apoya a inmigrantes en estado de exclusión social, donde he acompañado y llevado grupos de personas en dicha situación. En consulta trabajando con mis clientes, me doy cuenta que la sexualidad era y es un tema recurrente , un tema caliente. La sexualidad siempre me ha apasionado por todo lo que contiene; conexión, intimidad, belleza, misterio, profundidad, silencios, éxtasis, placer, respeto, tabúes, intercambio de energía. Escuchando mi intuición y apoyado siempre por mi curiosidad realizo un postgrado sobre la sexualidad en terapia, y al finalizarlo me di cuenta que no estaba conectado con mi cuerpo como creía y sentí que la vida me estaba invitando a seguir en esa dirección, meses más tarde decido realizar una formación de sexualidad somática dándole un giro a mi vida personal y profesional, decido entonces dedicarme exclusivamente al trabajo de la sexualidad desde las bases de la terapia Gestalt: La presencia, el Aquí/Ahora, el Darse cuenta, y responsabilidad, las que considero fundamentales también a la hora de entrar en contacto con un otro. Realizo una formación de sexualidad somática profunda e íntima , la cual no solo me ha enriquecido en el ámbito profesional, también me ha ayudado en mi vida personal. Me ha servido para seguir profundizando en mi propia conexión corporal de una forma responsable, respetuosa, consciente y amorosa. Durante esta formación también me di cuenta que la comunicación con algunas de mis parejas sexuales habían sido en general pobres; obviamente con algunas excepciones. Y en lo que a comunicación me refiero, es al no haberme animado, atrevido, a pedirle a mis parejas lo que me gustaba o hablar de sexo, gustos, fantasías alcanzables o no, dándome cuenta lo mucho que distancia y priva de complicidad y creatividad la comunicación pobre, escasa o nula en la intimidad. La energía sexual es pura energía creativa y desde entonces he decidido acompañar a personas con problemas, conflictos y bloqueos con su sexualidad. Solo puedo decir que luego de mirar , profundizar y meditar sobre mi propia sexualidad, y que aún lo sigo haciendo, he pasado por algunos de los lugares que transitan hoy mis clientes. Como por ejemplo: Yo estaba convencido de que el sexo solo se reducía al coito, a la creencia de “hay que tener orgasmos” creyendo que eso era la confirmación de haber tenido “buen sexo”(?), también aprendí a reemplazar la velocidad por la lentitud, y vaya descubrimiento!! Darme cuenta que cuanto más lento iba mas disfrutaba y más largo era el viaje, he aprendido a experimentar el placer y éxtasis manteniendo mi cuerpo relajado, libre de tensiones, aprendí a hacer circular la energía sexual por todo mi cuerpo, comprendiendo que en el contacto íntimo no hay objetivos a alcanzar, ya que estos solo generan estrés, mermando así la experiencia. Solo hay encuentro, presencia e intercambio mutuo de placer. También el hecho de no tener para nada claro lo que me apetecía o gustaba, a través de las prácticas de autoamor he vuelto a descubrirme y reinventarme y estoy convencido por que lo he vivido y experimentado en mi cuerpo, que puedo acompañarlos desde una presencia y escucha respetuosa, libre de juicios. Donde incorporo el trabajo con los 4 elementos básicos: tierra, agua, aire, fuego, los mismos que conforman nuestro cuerpo, regalando al cliente, gracias al camino en el cual honramos estos elementos, una cosmovisión o concepción global del universo diferente a la que ya conocen. La experiencia humana solo ocurre y es posible través de nuestros cuerpos. Donde habitan todos los bloqueos y miedos conscientes e inconscientes. Donde está toda la memoria ancestral de todas nuestras vidas. Lo que te ofrezco es un viaje de reencuentro contigo mismo/a, con tu propio placer, donde puedas levantar tu poder con responsabilidad y consciencia, recuperar la alegría , la salud y la conexión física y psíquica con la vida que eres. Sabiendo que somos seres sexuales, con el increíble don de crear vida, y siendo consciente como la sociedad, la cultura y sobre todo la religión se han encargado de ocultar, minimizar, y desvalorizar la sexualidad.
Mi intención es acompañar a personas valientes y comprometidas con ellas mismas, en un viaje íntimo para reconectar, validar, disfrutar y reconocer el ser sexual que son. Lo hago porque creo que es vital para la evolución del Ser humano y estoy convencido que el mundo será un lugar mejor cuando las personas reconecten de una manera responsable y saludable con su sexualidad y placer.